Ensayo Paola Restrepo G.
El arte de tejer alas con modelos educativos del siglo
19, en una infraestructura del siglo 20, para mentes del siglo 21:
Por: PAOLA A.RESTREPO G.
Han pasado ya casi 20 años, desde que el gobierno nacional a través de
sus más elocuentes funcionarios visitaba los colegios públicos de nuestro país,
socializando el plan decenal de educación que entre sus objetivos más románticos
y profundos deseaba ”concitar la
confluencia de voluntades y esfuerzos de toda la nación alrededor del proyecto
educativo más ambicioso de nuestra historia: la formación de seres humanos
integrales, comprometidos socialmente en la construcción de un país en el que
primen la convivencia y la tolerancia, seres humanos con capacidad de discrepar
y argüir sin emplear la fuerza, seres humanos preparados para incorporar el
saber científico y tecnológico de la Humanidad en favor de su propio desarrollo
y del país.” (plan decenal de educación -23 de febrero de 1996); Y le
califico como romántico sin desprecio alguno por tan fino argumento, pues
considero que el problema no es de contenido, sino de las extrañas acciones que
acompañan las políticas educativas de nuestro país; pues en el papel la educación
en Colombia en el papel, se acerca bastante a la perfección, pero
lastimosamente los hermosos modelos importados que gozan de un corte social,
nacen y se van resecando a través del tiempo, al quedarse sin alimento alguno,
pues no sobreviven en la gran maraña capitalista que les roba su esencia.
Menciono el plan decenal de educación, pues en el 96, a mis 16 años y
después de muchas palabras técnicas, de un gran esfuerzo del expositor para que
los jóvenes entendiéramos y participáramos en esta naciente revolución,
confieso no haber entendido mucho de la política educativa de la época, más
resalto dos aspectos que llamaron notoriamente mi atención; el primero fue la
oportunidad de participación que habría para nosotros, los alumnos, los sin
luz, los que hasta ahora éramos simples convidados de piedra a ese extraño
mundo de la educación; y lo segundo era
el hecho de estar inmersa en una gran revolución de ideas, avances tecnológicos
y acciones que le daban sentido al hecho
de poder aportar al menos un pensamiento, un interrogante, una opinión adversa,
que se yo, quizás un brote de rebeldía; pues hasta el momento en el aula
existía un mandato casi sagrado: el de atender al profesor, memorizar y digerir
sin cuestionar sus enseñanzas.
Alabo con sinceridad la posibilidad de construirnos juntos, las palabras
de Freire siempre han sido rema en mi labor, creo fielmente que: “enseñar no es
transferir un conocimiento, sino dar la posibilidad de producirlo.”(FREIRE) un día nos hacemos docentes y en el camino nos
vamos convirtiendo en verdaderos maestros, me emociona el pensar en que como
docente tengo la posibilidad de inspirar vidas y como maestro le doy puntadas a
la construcción de un proyecto del vida de mis estudiantes, es posible que no
seamos los profesionales mejor pagos del país, pero nosotros inspiramos a la
humanidad el deseo de salir adelante, la emoción de participar en su diseño
personal; un maestro teje alas y permite al individuo decidir el diseño que se
adapta a sus necesidades; no podemos ser hipócritas diciendo que el dinero no
nos importa, pues gran parte de nuestra calidad de vida depende de él, pero
estoy segura que la razón por la cual el maestro sigue parado en la brecha, al
pie del cañón es porque el hecho de revitalizar sus comunidades realmente le
cautiva.
Debemos revolucionar nuestros espacios, concebir la investigación y el
uso de nuevas tecnologías en el desarrollo de nuestras prácticas educativas, como
herramientas vivas en el aula, para motivar la inquietud, y permitirle a nuestros jóvenes una
primera visión de lo brillante que puede ser el futuro, pues “las TIC son hoy día imprescindibles, dado
que están en condiciones de ofrecer escenarios educativos didácticamente
apropiados y pertinentes para apoyar y enriquecer la construcción de
conocimiento” (Valencia., 2012), nos permiten crecer
con cada vivencia a través del trabajo en redes de conocimiento, y nos acerca un poco más a los universos paralelos
que cohabitan a nuestro alrededor.
Cada ser humano es un mundo y la construcción de un proyecto conjunto a
través de las tic, permite que afloren mis competencias, esos rasgos de
pensamiento, esas motivaciones, gustos e intereses que nos permiten ser únicos;
la innovación como experiencia pedagógica permite explorar no solo las
potencialidades de mi grupo, si no potencializar mis propias destrezas, me ha
ayuda a ser más recursiva, exigente y comprometida al tratar de dar respuesta a
un problema, de otro lado permitiendo que mis estudiantes construyan su propio
conocimiento y descubran la riqueza existente en el aprovechamiento de la
inteligencia colectiva, he dado un paso más lejos del pedestal de la clase
magistral, tan tentadora pues el poder sabe a miel cuando quien lo ejerce eres
tú.
La apropiación de nuevas prácticas educativas mediadas por tics,
permiten que mis estudiantes maticen su pre saberes desde experiencias
creativas en red, no solo pone el conocimiento a un clic de distancia, sino que
permite desarrollar dos de las competencias más importantes para enfrentar los
nuevos desafíos laborales que nos brinda el futuro, como son:
ü
el desarrollo de competencias para el trabajo
cooperativo
ü y la capacidad de aprender a aprender.
El futuro completamente incierto, nos revela que: “el conocimiento es cambiante y el aprendizaje es permanente y que las
Instituciones educativas no son las únicas que enseñan o donde se adquiere
conocimiento” (Valencia., 2012), para estar avante con los retos
de formar ciudadanos integrales para la solución de problemas en sus entornos
sociales, debemos repensar el ejercicio educativo, renunciar a el uso activista
que la escuela le da a las herramientas tecnológicas y enfocar la inclusión de
las tic como herramientas socio culturales, que han impactado incluso el modo
en que nos comunicamos; recordemos que por oralidad el hombre ha hecho que su
cultura perviva en el tiempo.
Así pues comprendiendo los diferentes artefactos presentes en la vida de
nuestros estudiantes, entenderemos las nuevas formas en que estos se comunican,
asimilaremos de mejor el modo en que las
nuevas generaciones seleccionan y realizan sus procesos de aprendizaje.
En el presente inmediato del aula, no solo el docente posee y domina el
conocimiento, también el estudiante desde sus saberes digitales, desde su
natividad para el uso de nuevas tecnologías, tiene a su alcance un universo de
conocimiento, por lo que el ejercicio de enseñanza aprendizaje debería
centrarse en el desarrollo de un pensar hilado, coherente, crítico y reflexivo,
que le imprimiera a nuestros estudiantes la capacidad de filtrado de
información, reconociendo que esta se encuentra en todas partes, en sus manos y
en cantidades y calidades que requieren el filtrado de una mente adaptable al
cambio y selectiva en sus aprendizajes significativos.
No existe nada más valioso que participar en la formación de seres
autónomos de pensamiento, pues esa característica acerca al maestro a lo
divino; dentro de un verdadero maestro debe habitar un deseo intenso por participar en la formación de
líderes que destaquen por su capacidad creativa, una verdadera pasión por
inspirar a los demás seres humanos a que no solo sueñen con agitar las masas,
sino con la posibilidad de auto gestionar sus vidas (posicionamiento dentro de
la sociedad del conocimiento), de arrebatarle a este sistema grandes
posibilidades para su futuro, pero con honestidad, con paciencia, dispuestos a
nunca rendirse hasta lograr una posición que los dignifique y que rompa con la
inequidad, con la diferencia de clases y oportunidades.
El papel del maestro de este mundo cambiante, debe obedecer a un hecho
sin precedente, y es que pertenecemos a la clase pensante de este planeta, nuestro
papel debe recobrar el protagonismo de antaño (pero con herramientas del nuevo
milenio), ya no por instaurar pequeños infiernos en el aula, sino porque
nuestras clases deben ser realmente emocionantes, movilizan sentimientos pues
son; las emociones el cemento que pega los aprendizajes significativos. (Dielmer Fdo. Giraldo-convención tics 2013).
Aun con escasos recursos tecnológicos, con una infraestructura quedada en el
tiempo, con servicios complementarios a medias, sin el suficiente personal
administrativo, con una marcada inequidad si comparamos al profesional docente
que sirve como trabajador estatal con respecto a otros empleados del estado, y
con elevados niveles de estrés por la desequilibrada relación técnica estudiante- docente la cual violenta
la norma constantemente y es el detónate para que hoy por hoy muchos docentes padezcan
enfermedades físicas y psicológicas, sin mencionar que no estamos preparados para ser mediadores
en aulas totalmente inclusivas, con estudiantes que rebasan nuestros
conocimientos en uso de nuevas tecnologías, donde no solo somos docentes, sino
enfermeros, guías espirituales y policías; aun con un sistema de salud
colapsado, que en vez de hacernos promoción y prevención, nos hace suplicio y
tortura; aun con todo lo anterior, esta sigue siendo la mejor profesión del
mundo, nuestro trabajo es como la filigrana, lleno de delicados detalles, el
maestro del nuevo siglo debe equipar el aula con rasgos propios de este tiempo,
para lo que se hace necesario pensar en un modelo educativo, para realizar un
proceso de enseñanza aprendizaje desde la incorporación de uso y apropiación de
tics, en el que con seguridad es muy importante contemplar las siguientes
características:
ü
El trabajo cooperativo como eje fundamental de la
gestión de la inteligencia colectiva.
ü
El rol docente como un ejercicio de mediación y
potencialización de recursos
ü
El proceso de enseñanza aprendizaje con transposición
didáctica acorde a la natividad digital de nuestros estudiantes.
ü
La planeación curricular debe considerar las tics como
herramientas para la inclusión
ü La planeación de aula, debe apropiar una metodología didáctica, que
responda a un modelo constructivista donde la adquisición del conocimiento se
realice de manera flexible, respetando pre saberes, construyendo el
conocimiento en equipo, privilegiando el desarrollo de competencias que mejoren
la auto gestión de conocimiento (filtrado y procesamiento de información) y
como respuesta al proceso evolutivo del uso de herramientas tics que se está
gestando a nivel mundial.
El futuro siempre nos lo han pintado de gris, que todo tiempo pasado fue
mejor, que esta es la generación equis, que están casi perdidos, y hoy doy
gracias por ello, porque allí es donde está la labor, pobres niños ricos que
hoy lo tienen todo, sisben, restaurante escolar, transporte, dotación de útiles
y familias en acción… ¿Qué va a ser de ellos si nadie les enseña, que en la
vida no todo es gratis?...pobre nueva generación de padres confundidos, que no
saben si ofrecer autoridad o una libertina amistad, que va a ser de ellos sin
el maestro decidido a untarse de pueblo, a ponerse las botas para ayudar a que
cada pieza se ajuste en el lugar indicado, allí es donde nace nuestra verdadera
vocación, donde florece el maestro que no se conforma con persuadir individuos
, sino que comprende su rol y que impacta de manera positiva su entorno, pero el maestro también está llamado a generar
controversia, como decía Thomas Edison
“la inquietud es el descontento,
y el descontento es la primera necesidad de progreso, muéstrame un hombre
totalmente satisfecho y te mostrare un fracaso”; solo me resta expresar que el
maestro teje alas, adelante grandes artesanos que el futuro espera halcones
dispuestos a volar muy alto para alcanzar sus sueños.
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